Desde el techo de La Habana. Restaurante La Torre

¿Desde dónde se pueden ver ahora las luces encendidas del restaurante La Torre de La Habana?

Que fuera posible desde lejos, aunque sin convertirse en un estorbo para los usuarios del lugar, fue uno de los retos planteados para la solución de diseño interior que desarrolló Proyecto Espacios, como parte de una transformación integral de los ambientes, los objetos y los aspectos gráficos del bar-restaurante La Torre, en la capital cubana.

En 2019, cuando La Habana cumplía 500 años, el equipo de Proyecto Espacios finalizó este trabajo de interiorismo e identidad visual que devolvió elegancia, belleza y funcionalidad al lugar.

Con este proyecto «llave en mano», recorrimos todas las etapas y facetas de trabajo: desde la investigación, la conceptualización y el diseño, hasta la fabricación y la ejecución, en condiciones retadoras. 

Debimos integrarnos dentro de una secuencia de obras en la que confluían diversos actores, y que tomó varios años para ejecutarse. 

En 2014 recibimos el encargo. Los años de explotación de las instalaciones recomendaban ya un mejoramiento estructural, de equipamiento y decorativo del lugar. 

El restaurante La Torre, uno de los más representativos de La Habana, se inauguró en octubre de 1957 en lo alto del edificio Focsa, de 36 pisos, considerado una de las siete maravillas de la ingeniería civil cubana, y elevado hasta los 121 metros de altura sobre el nivel del mar.

Inicialmente, el restaurante formó parte de un club exclusivo para afiliados, hombres, que en sus instalaciones incluía, además, barbería, gimnasio, sala de masajes, entre otros servicios.
 
En la ambientación original de los años 50 había elementos modernos y kitsch que quisimos rescatar en nuestra propuesta, pero dotándola con una estética contemporánea y minimalista.
 
Los espejos y los acabados en madera natural son protagonistas en el proyecto. La selección cromática se basa en el azul, el rojo, el dorado y el plata.
 
El mobiliario y otros accesorios fueron producidos en nuestros talleres de Factoría Espacios a partir de diseños de Proyecto Espacios.
 
La renovación del lugar incluyó también el rediseño de la identidad del bar-restaurante. Para ello se diseñó una contracción de la marca que recuerda una heráldica, óptima para aplicaciones en pequeños formatos, incluida la personalización de la vajilla y la cristalería.
 
Katiuska Criado Rodríguez, gerente del restaurante La Torre, considera que trabajar con Proyecto Espacios fue todo un reto.
 
«Para mí fue un aprendizaje, porque es un equipo muy profesional. Me hicieron pensar. Hicimos muchas horas de trabajo de mesa para soñar este lugar».
 
Desde lo alto del Focsa, a través de las fachadas acristaladas del restaurante La Torre, se consiguen unas extraordinarias vistas panorámicas de la ciudad, ya sea de día o de noche. 
 

Para Proyecto Espacios fue nuevamente un honor servir a La Habana, contribuyendo a la belleza y la funcionalidad de uno de sus tesoros.

La ciudad, a los pies del restaurante La Torre, reafirma su elegancia.

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